Nada que celebrar

De allí nuestra situación:

inseguridad y pobreza

pues trajeron corrupción

en nombre de la riqueza.

A las arcas las saquearon

y acabaron el paisaje

por eso en la incidencia

de esta fecha recordar,

olviden la Independencia:

¡No hay nada que celebrar!

No hay nada que celebrar

Alfredo Pedrique, ex mánager de los Leones del Caracas, le solicitó a los dueños de los equipos adscritos a Liga Venezolana de Béisbol Profesional (LPBBV), suspender la temporada 2017-2018 por la situación que enfrenta el país. Aunque aseguró que declaraba a título personal, sin juzgar el trasfondo político, aseguró que su opinión se la dictaba su conciencia, en respaldo a estos venezolanos que están sacrificando sus vidas, para el beneficio de todos,  y esperando que los directivos del deporte favorito del país le brinden apoyo a su planteamiento,  y suspendan la temporada 2017–2018. Por consideración humana, por la cantidad de niños que están muriéndose por falta de comida y medicinas–: añadió.

Por otra parte, la Confederación de Béisbol Profesional del Caribe (CBPC), que agrupa a los equipos profesionales de Cuba, México, Puerto Rico, República Dominicana y Venezuela anunció el miércoles de la semana pasada que la Serie del Caribe 2018 no se disputaría en Venezuela, como estaba programada, sino en México. 

El organismo precisó que la decisión se adoptó con el voto negativo de la Liga Venezolana de Béisbol Profesional durante una asamblea celebrada en San Juan, Puerto Rico. El presidente de la CBPC, el dominicano Juan Francisco Puello, declaró a la agencia Efe que Barquisimeto sería la sede de la edición sexagésima  Serie del Caribe, si las condiciones económicas, políticas y sociales cambiaban.

Al enterarse de la decisión, Pedrique, quien dirige actualmente la filial Triple A de los Yanquis de Nueva York, declaró su satisfacción por el resultado de la votación de la CBPC, ya que, conforme a su criterio, en Venezuela no hay nada que celebrar.

Creo que su evaluación, que se ha regado como pólvora en el medio deportivo internacional y que, además, ha sido respaldada por los peloteros criollos que militan en los equipos de Grandes Ligas, es también aplicable a todo lo demás; en especial, a la celebración de Día de la Independencia.

Los jefes del lumpen intelectual anti-venezolano

Pese a lo que dice el ministro de la Defensa, aquí no hay Independencia que celebrar, a menos que él haya solicitado la ciudadanía a la República Socialista de Cuba, que se ha apoderado de la soberanía de Venezuela.

En 1811 la nación era libre y su Constitución un ejemplo para el resto de los países que optarían por seguir el ejemplo que Caracas dio.

Hoy el presunto neogranadino que ejerce el poder delegado a nombre de Raúl Castro, el verdadero Comandante en Jefe de Padrino López. Maduro actúa  como lo hacían los antiguos procónsules romanos, entre ellos el recordado Poncio Pilatos, pues, como dice un ex oficial que vive autoexiliado–: La FANB viven otra realidad y no quieren ver lo qué pasa en sus propias narices, tratando de evadir responsabilidades.

Este buen amigo, cuyo nombre me reservo, analiza otros importantes datos:

No estamos ante una elección, por lo tanto la situación no depende de quien tiene más votos.  El régimen de Maduro no es un gobierno democrático sino una banda de delincuentes, de narcotraficantes, que secuestraron el poder en Venezuela y no lo van entregarán por manifestaciones o presión internacional. Si Maduro llegara renunciar, él y su combo irían presos, por sus vínculos con el narcotráfico y el terrorismo yidahista y el desastre que han hecho en Venezuela, todo lo cual hace imposible que su análisis situacional figure la entrega del poder.

La agresión a la AN HOY

El amigo, anticipando quizás el resultado del incidente protagonizado por Julio Borges y que sirvió de precedente al bochornoso acto ocurrido hoy mismo en la Asamblea, añade:

Además, observo que en la oposición hay falta de liderazgo que canalice el descontento, y promueva una solución a tan terrible situación. No se cuenta con los líderes con la capacidad y visión para llevar al país a un desenlace favorable. No estoy juzgando sobre quien tiene la razón o quien merece ser ganador o quién es el más bueno; la política es cruel y los buenos que triunfan no son siempre quienes triunfan. Estoy seguro que más del 90% del país rechaza a Maduro, pero como no es un tema de elecciones eso en este momento no importa. Que si han muerto 90 personas en las manifestaciones, lamentándolo mucho, tampoco importa.

Y finaliza así su corto pero demoledor análisis:

Maduro no saldrá del poder por votos o manifestaciones, solo una acción violenta de la FANB o una revolución sacaran a esos delincuentes del poder. Tampoco importa que enfrente a la curia venezolana en bloque, pues, como dijo Hitler, ¿cuántas divisiones tiene el Papa? Sólo espero equivocarme y que Maduro y el grupo de delincuentes que lo acompañan salgan pronto del poder.

¿Y cuántas divisiones tiene el Papa?

La Revolución Francesa terminó, ciertamente, con La toma de la Bastilla. Antes de que el 14 de julio se diera, hubo centenares de protestas puntuales, donde los manifestantes pedían comida: Si no tienen pan, ¿por que no comen tortas?, llegó a decir en su ceguera política la Reina María Antonieta. Estas luchas populares fueron in crescendo hasta que sus combatientes aprendieron a hacerlo mejor y más eficientemente. Además, el momento llegó cuando los soldados del Rey fueron incapaces de someter a los insurgentes en múltiples frentes y trincheras. 

Que es lo que, a mi entender, pasa aquí y ahora.

Las protestas cada vez son más coordinadas, y se están dando en todo el país.

En Barquisimeto, ha habido varios muertos, entre los cuales descuella un comandante de la GN. Al comandante lo despacharon con un tiro de escopeta. En la guerra urbana, primero se elimina al comandante militar –él era el jefe de la represión–. Caída la cabeza, se actúa contra el control, después contra la inteligencia. Y, por último, contra cada represor. Eso fue lo que pasó en París, en San Petersburgo y en La Habana, en los finales de sus correspondientes revoluciones. ¿Será lo que ocurrirá en Caracas? Al menos, en el Interior, pereciera que la gente comenzó a sacar sus chopos.

Luce como cierto –no digo que lo sea– que ayer se pisó otra raya roja con el inicio de interdicción de la Fiscal General. Lo cual me hace temer una nueva Guerra Civil a lo España, sobre todo porque la Caracas del 2017 es una suerte de la Madrid de 1933 y, en vez una Pasionaria gritando histéricamente: ¡No pasaran!; tenemos al Pasionario de Saab gritando histéricamente: ¡Ay, bichitos, malucos, bandidos, respeten, no pasen...!

En una de las últimas entrevistas de Vladimir Villegas –Globovisión, que ahora le da un tiro al gobierno y otro a la oposición para limpiar su imagen antes del próximo lanzamiento en EEUU– apareció Freddy Arenas, burgomaestre psuvista de San Mateo. Dijo prácticamente que Maduro había traicionado a Chávez. Que hablaba en representación de muchos de sus compañeros alcaldes, quienes estaban contra la Constituyente y se ya encontraban hartos de recibir órdenes y ejecutarlas, sin discusión, crítica ni autocrítica. Empero, fue expulsado del PSUV, como traidor por su rechazo a la Constituyente.

Freddy Arenas: El burgomaestre defenestrado

Mientras tanto, Maduro, el Unterführer de Raúl Castro hace lo mismo que hiciera Hitler en la zona polaca donde vivían alemanes antes de la II Guerra Mundial: se quema sus propios negocios para inculpar a los manifestantes. En Barcelona redujeron a cenizas un galpón vacío para decir que la oposición había hecho arder 50 mil toneladas de alimentos. ¿Quién se traga esta otra patraña comunista?

Si los países mediadores quieren dialogar, que vayan a La Habana a hablar con Raúl o con Timochenko. Esos son los Führer de estos degenerados.

El jueves pasado, en la fiesta adelantada de la Independencia de EEUU, la Embajada de Caracas suspendió los fuegos artificiales tradicionales por respeto a lo caídos –palabras textuales de su Encargado de Negocios, transmitidas por Globovisión–, y los asistentes al evento oraron durante 5 minutos por su eterno descanso- Tampoco para los yaquis nada hay que celebrar en Venezuela.